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¿Cómo eliminar la Tuta Absoluta?

TUTA ABSOLUTA O POLILLA DEL TOMATE

Es un pequeño insecto lepidóptero oriundo de zonas cálidas de America del Sur, que llegó a España en la campaña 2006 a la zona del Levante, extendiéndose rápidamente por todas las zonas de la geografía donde se cultiva el tomate, a excepción de zonas muy frías. Además del tomate donde se ha convertido en la plaga más importante, llegando a arrasar las cosechas, puede atacar también a otras plantas cultivadas como berenjenas y patatas.

Como todos los lepidópteros, tiene una fase de huevo, otra de larva, y otra de adulto o mariposa, siendo la fase de larva la que genera los daños en el tomate.

La mariposa adulta, tras aparearse pone los huevos principalmente en el envés de las hojas de los que nace una larvita que en seguida penetra en la hoja, tallo, o incluso frutos, y comienza a excavar una galería a medida que se alimenta. Tras pasar por cuatro estadios larvarios durante un periodo aproximado de 2  a 3 semanas, pasará a la fase de pupa o capullo en el suelo entre la hojarasca, donde realizará su metamorfosis convirtiéndose en adulto listo para aparearse y poner de nuevo huevos. Este ciclo puede repetirse hasta más de 10 veces en un mismo año, si las condiciones de temperatura y humedad les son favorables (especialmente en invernaderos), y una mariposa adulta de tuta puede llegar a poner más de 50 huevos.

Los huevos son difíciles de ver a simple vista pues miden menos de medio milímetro, y las mariposas, al ser de hábitos nocturnos tampoco es fácil verlas pues pasan el día en el suelo escondidas entre la hojarasca (son de colores grisáceos y de 1cm de longitud aproximada). En cambio las larvas y los daños que producen si son más fáciles de ver en las plantas de tomate. Las larvas tienen  tonalidades beige con la cabeza oscura en las primeras fases larvarias, y se vuelven de colores verdosos a partir del segundo estado larvario.

El ciclo completo de huevo a adulto tarda entre 30 y 38 días según condiciones ambientales.

Daños de la Tuta en tomate

Las larvitas recién nacidas penetran en hojas, tallos, o frutos, alimentándose de las partes carnosas de la planta, pero desechando la epidermis o capa más superficial de la planta, dejando visibles unas características galerías

Estás galerías que posteriormente se necrosan  favorecen además la entrada de hongos y otros patógenos en las plantas de tomate

Este daño directo que producen las larvas, debilita a la planta que dejará de producir flores y frutos e incluso perderá las flores y frutos que ya tenga en el momento del ataque.

COMO CONTROLAR LA TUTA ABSOLUTA

La mejor forma de controlarla es la prevención. Hay que actuar antes de que nos produzca daños irreparables. Para ello contamos con la importante ayuda de las trampas de feromonas para adultos de tuta, que debemos revisar frecuentemente y nos indican si es el momento de realizar un tratamiento químico. También existen trampas de confusión sexual que son empleadas habitualmente por los agricultores profesionales, así como la suelta controlada de insectos auxiliares depredadores de la tuta.

Otra medida para evitar una rápida propagación es destruir y quemar las partes de la planta de tomate que veamos afectadas, pues son un importante foco de propagación. Igualmente al terminar la cosecha, destruir todos los restos de las plantas de tomate. También es importante evitar repetir cultivos sensibles a la tuta año tras año (alternar cultivos cada año), y mantener el huerto libre de malas hierbas, ya que existen otras plantas solanáceas silvestres que pueden servir de refugio a esta plaga.

En invernaderos se recomienda emplear mallas tupidas de menos de 1,6 mm de espacio, para evitar la entrada de mariposas adultas. 

Las trampas de luz ultravioleta durante la noche, también los ayudarán a capturas las palomillas adultas de la tuta, antes de que puedan poner huevos en las plantas.

Y como siempre recomendamos: una planta sana y bien abonada, soporta mejor los ataques producidos por las plagas, por lo que el estado nutricional es importante para reducir los daños producidos por la tuta. Recordar que no hay que abonar más, sino abonar mejo, y en la cantidad recomendada, ya que el exceso de fertilizantes favorece la aparición de muchos tipos de plagas.

Existen algunos extractos naturales como el aceite de neem que repelen al adulto a realizar la puesta de huevos.

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